Un conductor con más de 33 horas de conducción continuada, una de las infracciones detectadas durante un control de transporte la semana del 13 al 19 de mayo en diecinueve estados, con participación de la Autoridad Laboral Europea (ELA) y ROADPOL, es la infracción más destacada, pero no la única preocupante.
Durante una semana, diecinueve Estados miembros han llevado a cabo un control de transporte con participación de miembros de la Autoridad Laboral Europea y de ROADPOL. La semana del 13 al 19 de mayo se ha saldado con un récord en el importe recaudado gracias a las muchas y graves infracciones detectadas en los diferentes controles realizados.
El mayor problema, como viene siendo habitual, los incumplimientos en los tiempos de conducción y descanso, en los que destaca un conductor que en el momento del control llevaba 33 horas de conducción continuada, ya que había realizado apenas unos pequeños descansos.
Esta es una cara de la moneda, la otra es la de un conductor que comentó al personal de la Autoridad laboral Europea, que proporcionaba folletos con información sobre tiempos de conducción y descanso y condiciones de trabajo de los conductores, que gracias a estas limitaciones y al miedo de las empresas a las multas sus empresarios no les «metían más presión de la que ya les meten.»
Escaso respecto de la prohibición del descanso en cabina
Entre los controles destaca el realizado en un parking en Amberes (Bélgica), donde el objetivo era comprobar que los conductores cumplían con la prohibición de realizar el descanso semanal regular a bordo del camión: el resultado fue decepcionante, de los 202 camiones controlados, dos terceras partes (135 conductores) incumplían esta prohibición: los empresarios no proporcionan adecuada acomodación a los conductores cuando les toca hacer el descanso semanal regular fuera de su país de establecimiento, «por lo que tienen que pasar en el camión sus horas de descanso en condiciones deplorables. En el parking hay duchas, pero no para 300 conductores.«
Además, en este mismo parking, donde también se querían controlar los mandatos del Paquete de Movilidad I en relación con el retorno de camiones y conductores a sus países de establecimiento, se detectaron setenta infracciones por no retornar el camión a su estado de establecimiento cada ocho semanas y treinta y cinco casos por no retornar conductor cada tres o cuatro semanas.
Destaca, de forma negativa, una empresa rumana que había convertido el parking en su base: los vehículos, con matrícula rumana jamás retornaban a Rumania. Los conductores recibían el salario rumano, aunque deberían haber percibido el salario belga, en este caso. Ante la gravedad del la infracción, la inspección a esta compañía continuará en colaboración con las autoridades rumanas.
Más de 273.000 recaudados en multas de transporte
En total, se detectaron 396 infracciones en la semana de control de transporte, con 555 camiones y autobuses controlados, que suponen una recaudación de 273.000 euros.
Más de una docena de camiones y otros vehículos de menos de 3,5 Tons no pudieron continuar el viaje, fueron inmovilizados. Algunos conductores fueron arrestados y se incautó un camión con la mercancía robada.
Otros incumplimientos destacados que se han detectado en esta semana de control, están relacionados con el uso del tacógrafo, con la seguridad de la carga, la actitud en la carretera o no hacer las declaraciones de desplazamiento de los conductores o falta de otros documentos, como la licencia comunitaria.
El objetivo ahora es realizar controles posteriores que estarán relacionados con el desplazamiento de conductores, cabotaje y otras situaciones que afectan enormemente al mercado común europeo ya que el transporte es un sector de la actividad transnacional y fundamental para la economía europea.
